Consejos refrescantes para oficinas calurosas
Estamos de mejor humor cuando el sol aparece. En el cielo no hay nubes y el tiempo es estable. Las heladerías están llenás y los parques también. Las piscinas municipales consideran si deben abrir antes de tiempo. Todo esto aparece aún cuando los termómetros sólo muestran 15 o 16 grados pero ya se tiene la sensación de estar en un verano mediterráneo con vientos africanos. Quizás no esté acostumbrado al tiempo cálido y cualquier temperatura que supere los 15 grados le parece calurosa. Quizás sea porque lleva aún la ropa de invierno.
Desgraciadamente el código de vestimenta para la oficina no conoce perdón para el verano caluroso. Cuando debe mostrar seriedad, una camiseta de colores llamativos puede ser una catástrofe absoluta. Por eso en muchas ramas del mundo laboral hay reglas estrictas no escritas sobre la vestimenta a llevar. No es sólo el asesor financiero el que no puede evitar llevar el traje gris oscuro en las temporadas más calurosas. A pesar de ello queda un poco de espacio libre que se puede utilizar para poder vestir de una manera más refrescante e ir de todas formas elegante.
A menudo se infravalora la parte del atuendo que más posibilidades de combinaciones ofrece: el traje. ¿No acabamos de decir que lo clásico casi nunca cambia? Es cierto, pero sólo en algunos casos. Quien en pleno verano va a la oficina con el traje de lana gruesa es muy buen entendedor de calidad (lo que en este caso no es una ventaja) o muy inflexible. Por suerte existen telas para el traje de verano que son claramente más frescas. No tiene que ser siempre el clásico traje italiano hecho a medida con seda. El algodón es una buena elección. El lino es perfecto para el verano aunque en el traje para la oficina no se recomienda ya que se arruga fácilmente. Otra alternativa son lanas muy finas siempre y cuando no tengan relleno y sean ligeras.
Desgraciadamente tiene menos elección en lo que respecta a los zapatos. Dejar los calcetines en casa no suele ser una buena elección. Quizás en el atuendo de tiempo libre se pueden llevar unos mocasines sin calcetines pero para el traje de negocios esta variante es simplemente inadecuada. Elija calcetines oscuros. La lana fina es una buena alternativa como material. Quizás sea a veces un poco calurosa pero también absorbe mejor el sudor. Eso lo agradecerá cuando llegue a casa, se quite los zapatos y no los vea inundados de sudor.
La camisa es otro aspecto importante. Puede elegir modelos sencillos que no tengan puño doble ni que necesiten gemelos. En primer lugar porque lo que menos necesita es una acumulación de tela extra y en segundo lugar porque puede llevar unos puños de camisa algo más informales que incluso se pueden remangar. Si lo compara con las camisas de manga corta es la mejor solución. La manga corta pertenece exclusivamente al atuendo de tiempo libre. En ese caso por favor no la lleve con corbata y llévela por encima del pantalón.
Algo verdaderamente importante durante el verano es la tela de la camisa. Las camisas de tela sintética son conocidas por sus manchas de sudor bajo el brazo. Eso no es sólo incómodo, sino que queda mal y huele peor. El algodón fino es mucho más cómodo de llevar. Además un cuello sencillo es una ventaja por lo que no se recomiendan cuellos de camisa con refuerzo.
Lo que sí debería evitar a toda costa es llevar el cuello de la camisa abierto con corbata. Un nudo apretado que intenta cerrar la camisa no queda de ninguna manera bien. Si su empresa se lo permite puede dejar la corbata en el armario de su casa. En el caso en que su empresa no se lo permita (lo que suele pasar en muchas empresas conservadoras), tiene que aguantar y llevar la corbata aún en días calurosos. Bueno, al menos una empresa japonesa ha dado con la solución: en 2008 sacó al mercado una corbata con pilas y USB que llevaba un ventilador en la parte ancha.