¿Qué ventajas tiene un buen atuendo?
Una lástima. A primera vista todo lo que lleva es perfecto. Los zapatos brillan como soles. La camisa recién planchada no tiene niguna arruga o mancha. Sobre el traje, ha escogido un modelo de marca cara y la corbata: un modelo británico de regimiento que ha visto en la estantería de la tienda de ropa. ¿Con esto no puede salir nada mal, verdad? Puede pensar uno.
Sin embargo a veces no resulta tan fácil creal un buen atuendo. Incluso cuando la calidad tiene un precio, una cartera llena no ayuda mucho si no se tiene estilo. Lo que realmente quiere es ir bien vestido, ¿verdad? Y seguro que busca algunos consejos ¿cierto? Pues ha tenido mala suerte. No hay consejos generales para que cada hombre vaya vestido perfectamente. En cambio siempe se puede mostrar estilo con un par de reglas básicas que pueden evitar, al menos, las mayores catástrofes de la moda.
Para cada uno se tiene que buscar el atuendo adecuado. Eso parece lógico, pero no lo es. Millones de hombres pulen los suelos con el largo del pantalón porque lo han comprado demasiado largo. Otros cuantos millones enseñan los gemelos de la pierna cuando se sientan en una silla y el pantalón es demasiado corto. Los jerseys se siguen llevando aun cuando han encogido los tallas por una mala eleción en el programa de la lavadora. De esta manera quedan por encima del cinturón y resultan demasiado ajustados. Aún cuando la despedida sea dolorosa, hay prendas que están mejor en el contenedor de prendas que en su armario.
Por alguna razón que desconozco en este país hay un amor inmenso a las camisas con cortes demasiado anchos. Esto no es en principio una mala idea si es un hombre de negocios que desea esconder la curva de la felicidad. Si es una persona con poca barriga y lleva una camisa muy ancha, parece que se la ha pedido prestada a su hermano mayor (incluso cuando el cuello de la camisa le quede perfectamente). Un modelo claramente mejor es uno que se adapte a su cuerpo como son los modelos de camisas italianas.
Es aquí donde reside el próximo truco. El atuendo se tiene que ceñir a la forma de su cuerpo. ¿Es usted alto y delgado? Olvide las camisas y pantalones anchos. Estas prendas ondean y le hacen parecer aún más delgado.
También si es una persona bajita le quedan mejor las prendas estrechas y que marquen su cuerpo, a no ser que tenga unos kilos de más. Aquí debe encontrar el ancho adecuado pero sin elegir las prendas XXL. Este tipo de prendas a veces le hacen parecer más grande de lo que es. ¿Tiene un cuello corto? No lleve camisas de cuello alto. ¿Brazos finos? Nada de manga corta.
Además debe evitar algo a toda costa: parecer disfrazado. Si usted es una persona con barba de tres días, un traje de chaqueta puede significar su tumba. Una chaqueta americana sería la elección adecuada. De la misma manera queda ridículo una camiseta de colores llamativos en una oficina donde la palabra clave es el conservadurismo.
E incluso si suena un poco insólito: intente que la gente le eche más de un vistazo. En cualquier atuendo debe haber una parte que resalte. Esto no significa que aparezca en la oficina con la corbata de motivos más llamativa del mundo con colores extremos, todo lo contrario. Seguro que se sorprendería de saber lo bien que queda un pañuelo de bolsillo estampado con un blazer sencillo. O unos buenos gemelos con vaqueros. Esto llama la atención además de ser moderno.