Corbatas con motivo
Debe haber diversión, pero no en el traje
La corbata se ha convertido en una parte indispensable de nuestra cultura de vestimenta. El primer político que renunció a ese accesorio procuró incluso escándalos. Ramas de negocio enteras requieren la prenda tradicional obligatoria. La corbata cierra no solo cuello de la camisa con armonía sino que también proporciona una oportunidad para poner de manifiesto la individualidad dentro de la vestimenta formal y, a veces monótona, de traje de negocios.
Sin embargo esta individualidad no debe ser exagerada. El triunfo de las corbatas impresas y el desarrollo de capacidades técnicas condujeron a la aparición de uno de los accesorios de moda más controvertidos de todos los tiempos: la corbata con motivo de gran tamaño.
Eso sí: no estamos hablando aquí de motivos florales, corbatas paisley, cuadros o lunares que decoran el diseño allover una corbata. Estos son, siempre y cuando se mantengan en un sutil diseño o una ocasión festiva, generalmente aceptados aunque ligeramente lúdicos. No, el tipo de corbata de la que estamos hablando en el presente artículo tiene grandes representaciones de símbolos de dinero, personajes de dibujos animados y puestas de sol.
No hay casi nada que no exista ya. Signos como el dólar son motivos populares. Los aficionados al fútbol usan sus insignias del equipo. Los cazadores se destacan con faisanes, músicos con fotos de sus instrumentos, coros con claves. Pues bien, este último puede, en algunos casos, incluso quedar bien. Lo que se caracteriza en cualquier caso es que: no es serio.
Llevar una corbata inadecuada supuso el despido para un banquero de Frankfurt hace unos años. En la corbata estampada que llebava con orgullo, un animal de comic aparecía con la frase: "Todos criminales". Esto no resultó de agrado a sus superiores directos y mucho menos a algunos clientes que opinaron que era demasiado crítico.
Mientras tanto, el mercado está inundado con corbatas inusuales (por lo general hechas de poliéster barato) y ahí están con la luz y el movimiento. En algunos modelos puede sonar el "cumpleaños feliz", otros tienen un pañuelo para limpiar las gafas y otros llevan incorporado o un posavasos para llevar latas de cerveza
Entre estas meteduras de pata es sorprendente que el origen de la corbata con motivos sea en realidad de carácter más artístico. Así sorprendió el gran Salvador Dalí en el mundo del arte, no sólo con su extravagante bigote, sino también cuando comenzó a pintar obras individuales en las corbatas de seda. Los coleccionistas de piezas únicas pagan hoy verdaderas fortunas y además otros artistas siguen haciendo lo mismo. En esa época los motivos de las corbatas eran pintados a mano y tenían un valor artístico. Con un mayor desarrollo de la tecnología de impresión también aparecieron pinturas de viejos maestros como Rembrandt y Da Vinci en corbatas aunque aquí sólo se hizo en un estilo sencillo.
Después de que las camisetas de batik se hubieran ido de la moda a finales de los gloriosos 70, la sociedad de amantes de las manualidades encontró un nuevo pasatiempo en los años 80 y los años 90. La pintura de seda estaba de moda y se ofrecían cursos en cada colegio de la comunidad. ¿Por qué no elegir la prenda de seda por excelencia, la corbata, para decorar? En más de un árbol de Navidad se encontraron estas obras hechas a mano. Mientras que las piezas individuales realmente tenían el rango de pequeñas obras de arte, las estructuras ricamentes decoradas con efecto de sal y mezcla con diferentes técnicas no se consigieron asentar en la moda masculina. A estas corbatas se las puede ver hoy en día en la mayoría de las reuniones familiares, sobre todo si un miembro de la familia es el que ha cogido el pincel
Como ya hemos dicho, con un traje debe pensarse dos veces el llevar estas corbatas tan singulares. Y, sin embargo, tienen una vía de escape en la que también pueden ser adecuadas. Así, en las celebraciones informales según la ocasión, las corbatas con motivos siempre son buenas para echar unas risas. Y si la corbata con la guitarra eléctrica o el logotipo de su banda favorita de joven le quita el rigor al traje, mejor. Incluso los personajes de dibujos animados no quedan generalmente mal, sólo si el que los lleva es mayor de diez años. En la oficina, usted debe seguir dependiendo de rayas.