Tirantes y cinturón
¿Sujeta la ropa por la cintura o por los hombros?
„¿Debo confiar en un hombre que lleva tirantes y cinturón al mismo tiempo? ¿Un hombre que ni siquiera confía en sus pantalones?“ Esta inusual pregunta hacía el mítico Henry Fonda en la película de Sergio Leones rodada en 1968 „Hasta que llegó su hora“. El problema de la sujeción de los pantalones es tan actual que hasta en las películas hacen mención de ello. La barriga del hombre es la zona problemática por excelencia. Que el pantalón se mantenga arriba es una imposibilidad física. Desde que existen los pantalones se han buscado fórmulas para intentar sujetarlos. Las dos maneras más comunes son: tirantes y cinturón.
Si echamos un vistazo por la ciudad veremos que las personas llevan más bien cinturón en lugar de tirantes. Los seguidores de la moda clásica británica de la cultura Savile-Row opinan que el cinturón es la tradición más grande en la cultura de la sastrería y el traje a medida. Estos seguidores de la moda atemporal están seguros de que sólo los tirantes pueden mantener el pantalón en su lugar. Los verdaderos pantalones británicos no tienen ni siquiera trabilla para cinturones, en su lugar llevan los botones para abrocharlos a los tirantes. Ya que estos accesorios pertenecían tradicionalmente a la ropa interior, por supuesto sólo se podían ver por casa. Para poder ocultar los tirantes y también para proteger del frío apareció el chaleco.
Al menos hasta bien entrados los años 20 los tirantes eran la prenda estrella para sujetar los pantalones, incluso cuando en la cúpula militar de la Primera Guerra Mundial empezaron a llevar más el cinturón. Con el desarrollo de la moda y la aparición de la música jazz, un estilo más informal desterró el chaleco y con ello el sistema de sujeción de pantalones. A finales de los años 20 se vendían cuatro veces más los cinturones que los tirantes. Además la influencia de la moda italiana con sus cortes finos, estrechos y elegantes acabó sepultando la moda de los tirantes.
Actualmente vemos tirantes de vez en cuando. El presentador de televisión americano Larry King hizo de sus „suspenders“ su marca personal, el músico alemán Roger Cicero y el showman Götz Alsmann los llevaban con una camisa blanca en honor a los dorados años 20. Pero nunca debe seguir el ejemplo de Michael Douglas en la película de 1987 „Wall Street“. En ella apareció con unos tirantes llamativos y cinturón.
Si se decide por llevar los tradicionales tirantes debe ser cauto y tener en cuenta la corbata. Si la corbata es estrecha, los tirantes no deben ser muy gruesos. Los tirantes forman una línea recta que, junto a la corbata, hacen su figura más estilizada.
Hay que señalar que los tirantes eran tan famosos antiguamente en parte porque los pantalones se llevaban a otra altura. Antes llegaban justo hasta la mitad de la cintura y ahora van por debajo (lástima, el cinturón no disimula esta barriga sino que la acentúa más). Los pantalones actuales tienen un corte más bajo en dirección a la cadera.
El cinturón no es más que una banda que se anuda por la barriga para sujetar los pantalones. Como parte del uniforme militar, este accesorio existe desde la Edad de Bronce y se utilizaba para colgar la espada. Esto no ha impedido que los diseñadores de moda hicieran varios modelos y los adaptaran a la vida cotidiana. El cinturón es de color marrón o negro, pero también hay modelos confeccionados con tela, hebillas con brillo o con efectos. Para un atuendo formal el cinturón debe ser sencillo, fino y de piel. La hebilla debe ser discreta y en tonos dorados o plateados a juego con los gemelos y el reloj.