Los mayores impedimentos de la moda

Vestir mejor ¿Qué se lo impide?

Es muy fácil. Hay que prestar un poco más de atención al aspecto exterior. Pero si todo es tan fácil: ¿por qué encontramos hombres con pantalones de deporte y camiseta interior por la calle? El aspecto exterior en el ámbito privado y el laboral se puede diferenciar de manera extrema y mejorar mucho. ¿A quién no le gusta ir más elegante que el jefe?

Cada hombre pone sus propios frenos a la hora de hablar de estilo y a veces esos frenos no tienen sentido.

La excusa usada por excelencia es: no tengo dinero. Sin duda es un buen argumento pero la mayoría de las veces no se sostiene. Con un poco de práctica y sentido de inversión se puede confeccionar un armario elegante y versátil que le hará ir siempre perfecto. Las prendas no tienen por qué ser caras, le tienen que sentar bien. Si una tienda de segunda mano tiene una chaqueta tweed que es una ganga y después de llevarla al sastre y adaptarla a su cuerpo resulta una obra maestra, verá que al final se ha ahorrado un buen pellizco. La corbata de seda confeccionada a mano de internet puede resultar drásticamente más económica que en una tienda. Quizás compre un pañuelo de bolsillo. Este simple accesorio da un aspecto extremadamente elegante incluso a una combinación con vaqueros. A veces incluso una camisa bien planchada en lugar de una simple camiseta le lleva a una liga superior. Además: si cuenta el dinero que se gasta en el café de la mañana puede tener al final del año suficiente dinero para un buen traje, ¿no nos cree? Haga el cálculo.

Un error frecuente pero no reconocido es: no tiene ni idea de moda de caballero. Usted siempre viste con las mismas prendas que piensa que le quedan bien. Puede que incluso mire en libros, blogs y foros sobre algunos modelos, pero olvida que en la práctica eso no ayuda. No tiene por qué ser experto en moda. Tampoco saber la respuesta a todas las preguntas. Empiece por probar algunas prendas que le queden bien y que combinen adecuadamente. No tenga miedo a experimentar.

Quizás simplemente no quiera hacer nada en falso. Eso tiene mérito, pero no está pensado para la práctica. En serio: si su atuendo le quedara perfecto, ¿cree que alguien se fijaría en si tiene zapatos negros con cinturón marrón? Las reglas de estilo son un medio, en ningún caso una ley. Si realmente ha practicado el buen gusto se puede permitir alguna vez combinaciones extravagantes.

En la práctica la barrera más grande es sin duda el ambiente. Si usted está acostumbrado a ir a la oficina con pantalones de deporte y una camiseta vieja, seguro que llamará la atención si aparece con traje y corbata de seda. Este atuendo no es apto para cualquier trabajo. No se trata de disfrazarse para ir al trabajo, simplemente de dar un paso más respecto a su moda. Si un traje de chaqueta no pinta nada en su oficina, olvídelo. Pero unos vaqueros y una camisa bien planchada es subir de nivel. Si trabaja en una rama más bien creativa debe prestar atención a no ir demasiado conservador. Destaque por los complementos. Quizás unos bonitos gemelos o una corbata pañuelo son la solución.

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