¿Botón fuera, cabeza cortada?
Coser un botón de manera rápida y fácil.
Enérgicamente se abrocha la camisa que está limpia, perfectamente planchada y combinada con el traje y la corbata. El discreto botón con toques brillantes está en su mano, un momento, ¿en su mano? ¡AYUDA!
Un botón caido no es motivo de pánico si tiene al menos un par de minutos. En contra de los rumores, el coser un botón no es un arte que sólo pueden aprender los mejores sastres. Lo único que necesita es un poco de hilo y una aguja. Si el botón se ha perdido, en la tienda seguro que le pueden dar un recambio. Además en las camisas de calidad siempre existe un botón de reserva cosido a la etiqueta interior que se encuentra a la altura de la cintura.
El primer obstáculo es el más difícil, se trata de enfilar la aguja. No tome mucho hilo, con unos 30-40 cm debería ser suficiente. Para enfilar la aguja existen varios métodos más o menos efectivos. Los expertos suelen recomendar poner un poco de saliva en la punta del hilo para que se una y tenga una entrada limpia. Otra alternativa es apretar el hilo con los dedos e intentar pasarlo por el ojo de la aguja.
¿Cómo? ¿Tiene una enhebradora? Bueno, es un poco aburrido pero también funciona. Este accesorio es muy práctico sobretodo cuando sus manos están temblando o no ha tomado un café por la mañana. Con una mano tranquila se enfila mejor.
Una vez enhebrado el hilo, tire de éste. Un truco: para evitar que vuelva a salir de la camisa, haga un nudo al final del hilo, pero sólo un nudo pequeño, no demasiado grande, sino quedará mal. La aguja tampoco debe ser enorme.
Para saber el color del hilo a utilizar, fíjese en los otros botones. Además puede ver si éstos se han cosido de manera cruzada o paralela.
Para que el hilo tenga un poco de apoyo, puede dar unas puntadas en el agujero donde estaba el botón y en la parte interior de la banda de botones. Para eso introduzca el hilo en la tela y tire. Ponga atención de que el hilo no se salga al tirar. Ahora introduzca la aguja desde el interior de la tela y pásela por el agujero del botón. Aquí tenga en cuenta de cómo van los hilos, de forma entrecruzada (botones cosidos en forma de cruz) o en paralelo. A continuación vaya con la aguja desde la parte exterior a la interior con el mismo movimiento. Realice este operación con todos los agujeros del botón y no sólo una vez, sino varias. No cosa el botón demasiado apretado porque sino la tela le hará arrugas.
Las útimas puntadas no se hacen en la tela directamente sino debajo del botón. Haga un nudo resistente en la zona de detrás del botón cosido. Si la tela es voluminosa necesitará unas puntadas extra. Con el hilo sobrante coseremos aún un refuerzo entre el botón y la tela. Para estar más seguros, se puede hacer un pequeño nudo con el hilo antes de cortarlo. Finalmente tendremos un botón muy estable y resistente.
Por cierto: en las camisas baratas (y con esto no quiero decir económicas) los botones suelen estar cosidos de manera que se pueden caer fácilmente. Normalmente están muy sueltos y no tienen refuerzo. Al llevar las camisas a diario, es sólo cuestión de tiempo que los botones se caigan. Aunque cueste un poco de tiempo: cuando compre una camisa asegúrese de que los botones están bien sujetos. Si no lo están, puede arrancarlos y coserlos usted mismo. De todos es sabido que una corbata a rayas discretas sólo puede quedar bien si la camisa está bien abrochada.
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